martes, 21 de junio de 2011

Pre-versión (Anticipo de la Perversión); Perversión (Póstumo a la Pre-versión)


Pre-Versión ( Anticipo de la Perversión)
- Che Alicia, poné mas comida que viene Jorge a cenar.
- ¿Otra vez?
- ¿Si, por qué? Tenés algún problema?
- No. Solo digo…vino la semana pasada…
- Otra vez rompiendo las pelotas vos? Ya sé que vino la semana pasada!
- Está bien Rodolfo…pero me hubieras avisado antes y ponía mas carne.
- Siempre jodiendo…la verdad es que no te entiendo. Es llegar del laburo y que vos me rompas las pelotas todos los días, viejo! Al final no sé de que mierda te quejás!!! Si salgo con Jorge, porque salgo y vengo borracho, si viene él, porque estoy con mi amigo en casa…me querés decir que mierda querés?
- Bueno Rodolfo yo pensé…
- No pienses…no pienses, para pensar estoy yo! Entendiste?
- Si Rodolfo…( y a Alicia se le hacía un nudo en el estómago)
- Así que ahora andá y hacé la comida q tengo una lija tremenda y mi amigo viene en un rato…ah, y sacá ese cara de culo que tenés, me hacés el favor?
Alicia se fue a la cocina conteniendo las lágrimas para que su marido no la viera llorar.
- Que hacés Jorge, querido?! Vení sentate, ponete cómodo, te estábamos esperando…!
- Qué hacés Rofolfito, como andás? – Se saludaron con un fuerte abrazo.
- Hola Alicia.
- Hola.
- No le des bola a la bruja que parece que la pelotuda ésta hoy no está de parabienes…tomás algo?
- Bueno dale, abrite este vinito…mirá lo que te conseguí papá!!!
- A la marosca … te gastaste unos manguitos,eh? No esperaba menos de vos.
- Aliciaaaaaaaa … traete dos copas, querés?
Alicia trajo las copas, puso la mesa y se sentaron los tres a cenar.
- Parece que a Ordoñez lo ascendieron y al Tarta lo van a rajar.
- Pero cómo, no me digas! Si el Tarta estaba en la empresa hace como 15 años.
- Y si, viste como están las cosas…
- Ah che y Mabel como está?
- Bien, se fue a cuidar a una tía, la que operaron de la cadera.
- Pero no me digas, q macana!
- Y si, está ocupadísima pero mandó saludos.
- Che y el sifón, bien gracias, no?
Alicia se levanto y fue a la cocina.
- Che te cortaste el pelo. Te queda bien.
- Si, se hace lo que se puede.
- Estas pintón, buen levante debes tener, jaja
- No, soy hombre de una sola mujer, …- reía entre dientes
- Si claro, de una sola mujer. … - se sonreía de manera sarcástica mientras le pellizcaba una mejilla. – Picarón ,casanova
Por un segundo sus miradas se cruzaron en lo que pareció ser un lapso de tiempo interminable.
- Perdón, les traigo la soda. Puso el sifón y se retiro raudamente como si interrumpiera algo.
- Rodolfo quitó rápidamente su mano de la mejilla de Jorge y se sirvió otro vaso de vino.
Después hablaron de política y Alicia comenzaba a bostezar. Trajo el postre; ella no había probado bocado, pero Rodolfo y Jorge ni se percataron de su presencia. Nunca se percataron de su presencia. Podrían estar horas charlando sin darse cuenta si se venia el mundo abajo o se prendía fuego la casa.
La charla siguió por horas, que si Perón tenia razón y que no me vengas con boludeces y que me vas a decir a mí si mi viejo decía…
Tomaron un café y al rato Alicia pidió permiso y se fue a su habitación.
Pensar que había abandonado la danza y un trabajo muy bien pago para terminar casándose con Rodolfo.
Se desplomó en la cama y se quedó allí. Luego de un largo rato, se incorporó y fue en busca de un vaso de agua y su inseparable pastilla para dormir.
Se deslizo por la oscuridad de los pasillos sigilosamente y con cautela. Como si no fuera la primera vez. No lo era. La luz del comedor era la única que permanecía encendida y se filtraba por la puerta entreabierta. Se acerco a ella y comenzó a espiar
Rodolfo besaba la nuca de Jorge mientras lo penetraba. Jorge se retorcía de placer sin hacer ruido alguno.
Perversión ( Póstumo a la Pre-Versión)

“Todo está permitido. Nada es lo que parece. Las apariencias socialmente correctas y aceptadas envuelven los más intrincados, perversos y deliciosos placeres. Placeres enterrados, pero no muertos. Que renacen cuando el incentivo es el correcto. No temer al monstruo es la premisa fundamental para reconocer que vivimos con él. Que está dentro nuestro y que solo espera el momento adecuado para darse a conocer. La perversión es despreciada pero tangible. La perversión existe.”
Escribiendo estas últimas palabras, Alicia cerró su diario íntimo y se dirigió a la cama.
- Me parece que nos estaba espiando. ¡Tu mujer nos está espiando!
- Siempre nos espía. ¿Nunca te diste cuenta?
- Me pareció, una vez, pero…
- Siempre nos espía. Me exita.
Rodolfo besó con pasión a Jorge, con un beso verdadero.
Alicia se sacó las chinelas y se recostó. – La perversión existe – Murmuró entre dientes.
Apagó la luz, se tapó con las sábanas y comenzó a masturbarse.

viernes, 17 de junio de 2011

El Día que las Hojas se Secaron.

Julia siempre había sido una nena llorona. De chiquita cualquier juego derivaba en llanto. Una caída de la bicicleta, un raspón por trepar al árbol eran motivo suficiente para q Julia llorara.

Lloró el día que empezó la escuela, el día que terminaba la escuela, cuando se le manchaba la hoja con el tintero, cuando otra nena le tiraba del pelo. Lloró cuando un chico le quiso dar un beso, en su primera salida, cuando escuchaba la radionovela, cuando se casó, cuando se casó su hermana, cuando se enteró que iba a ser madre, cuando su hijo nació. En los velorios de familiares y en los otros. En definitiva, Julia siempre tenía un motivo para llorar y si no existía, lo inventaba. Derramó lágrimas y lágrimas.

Siempre fue una mujer amargada y taciturna.

Un día de abril tocaron a su puerta, el comisario le dio la mala noticia de que su hijo Lucio se había suicidado.

Ese día, Julia no lloró.

Hace doce años que Julia permanece en el pabellón psiquiátrico y tampoco pronuncia palabra. Tampoco llora. Nadie de su familia la visitó en todo este tiempo y casi no tiene contacto con el mundo exterior.

Hoy la enfermera salió corriendo de su pabellón pidiendo auxilio y el cuerpo médico fue a verla. Nadie pudo creer lo que veía y quedaron atónitos ante la mirada impávida del doctor de guardia. Julia se había secado, como las hojas en el otoño. Afuera, llovía a cántaros.

miércoles, 15 de junio de 2011

El Día del Juicio

Dedicado a Gasmun q ayer me recomendó Waking Life...mirá lo q paso!


Todo había terminado mal. Siempre terminaba todo mal para mí y esta no iba a ser la excepción. El juicio había sido largo, abogados que defendían, fiscales que me hundían cada vez mas y el juez que sentenció en mi contra. Ya todo estaba perdido. Así que me encuentro en esta celda a punto de ser condenado a muerte. Qué es lo que hice, se preguntarán ustedes. Bien, mi culpa y cargo es ésta equivocada vida en la que me encuentro, la que no elegí, la que siempre aborrecí y de la que todos son culpables. Si, todos ustedes son culpables y yo pagaré sus crímenes.

Estas son mis últimas palabras, mi última comida, mis últimos pasos antes de morir.

“ Arrastro mis cadenas, cadenas de la muerte y yo mismo fabriqué cada eslabón.”

domingo, 5 de junio de 2011

Susurros

Me gusta jugar con Melinda en la habitación. Jugamos durante horas a vestirnos con ornamentos diferentes, a la escondida, y al piedra-papel o tijera. Cuando su mamá está en la sala la escucha reír a carcajadas y viene corriendo a ver de qué se trata el juego de hoy. A veces en su jardín jugamos a la rayuela y su mamá la mira con cara de preocupación.

Su papá es un tipo serio, trabaja en la gasolinera del pueblo de noche y está poco en casa. Melinda me contó que sus papás a veces discuten y que su mamá llora. Melinda lo sabe, aunque su mamá haga un esfuerzo tremendo por ocultarlo. Cuando su madre está triste en la cocina, me acerco y le acaricio el pelo. Entonces quiero ayudarla con los quehaceres y le acomodo los platos. Ella corre, se aleja. Presiento que me tiene miedo.

Me gustaría hablarle, decirle lo que siento, contarle que acá me estoy muy solo y mostrarle que ella no está sola. Melinda dice que no cree que sea una buena idea. No entiendo.

Hoy vinieron a casa personas que no conozco y se reunieron en un círculo alrededor de la mesa; una señora me habla, me escruta que debo irme de ahí, ella no entiende que yo no quiero. Que intento tener una familia nueva. Me persigue, tengo miedo, no quiero. Por favor Melinda, dame la mano, diles que me tienen aquí enterrado debajo de tu cama, que mi padre me mató!

Maldición! lo único que hacen es enojarme y hacer cosas horribles. Me convierto en un ser malvado.

Ven conmigo Melinda…no tengas miedo. Cierra los ojos que ya pasa. No sueltes mi mano. Su madre está asustada, llora, corre.

Quise evitarlo, pero no me dejan otra alternativa, vendrás conmigo.

Ahora seremos dos almas en pena.